Muchos escritores disponen de negro literario, pero... ¿y si alguien contara con un negro mediático?
Obligado a convertirse en negro literario para sobrevivir, dadas sus nulas capacidades sociales para promocionar su obra, ahora Raúl Mazurek dispone de un ænegro mediáticoÆ, un actor experto en comunicación oral, fotogénico y elocuente que lo ha encumbrado a lo más alto en cuanto a ventas y estatus, y que le ha permitido dedicarse a lo único que le gusta y sabe hacer: escribir sus propias novelas recluido en su casa, aislado del mundo y sumido en el anonimato más absoluto.
Todo va sobre ruedas hasta que Mazurek tiene que salir al exterior para recabar información e inspirarse sobre el tema de su próxima obra: las mujeres. ¿Podrá documentarse sobre la feminidad para escribir su próxima novela sin la ayuda de su doble mediático y especialista para las relaciones, con su fobia social a cuestas y sin su estatus de escritor famoso? ¿Realmente quiere escribir una novela sobre la feminidad o es una sublimación de sus insatisfacciones personales? ¿Es necesario æmeter el microscopioÆ para estudiar a las mujeres?
Tan neurótico como Woody Allen y tan salvaje como Bukowski, Enrique Rubio explora el lado oscuro del mundo mediático y, con un humor corrosivo e incendiario, sin concesiones a lo políticamente correcto y a las religiones laicas actuales, analiza lo más turbio e inconsciente de la naturaleza humana; las deficiencias e imperfecciones de hombres y mujeres y, sobre todo, de él mismo.
"Un escritor con un mundo, una mirada y una voz propios" (Lorenzo Silva)
"Un mordisco literario en la yugular del lector desprevenido" (Elena Ramírez, directora editorial de Seix Barral)
"Implacabilidad analítica, oscuridad brillante, lucidez maquillada de cinismo, prosa contundente, humor en forma de bala" (Rodrigo Cortés, director de "Concursante", "Buried" y "Luces rojas")